Calle Joaquín Costa, esquina con calle Conde
El último día de febrero,
sobre las 8 de la mañana, entró en el solar una pala excavadora y lo que
parecía una operación encaminada a limpiar la zona se convirtió en un paripé.
El palista arrancaba la
vegetación y la empujaba hasta un gran socavón que presenta la parcela,
arrastrando hasta allí toda la inmundicia que encontraba a su paso.
La orden dictada por el Ayuntamiento de Barbastro contra la propiedad hace 15 días, decía: … "proceda a la limpieza de toda vegetación espontánea y de maleza en el interior del solar, así como retirada de los residuos presentes en el mismo”.
Hasta aquí podría pensarse
que fue el Ayuntamiento, tras 2 años sin ordenar la limpieza del solar, el que
motu proprio dictó la orden mediante decreto 2023-0236 el 7 de febrero. Nada más lejos de la realidad.
Desde que en julio de 2020 se vació el solar de basura, ningún responsable (propietario o Ayuntamiento) ha visto necesario limpiarlo y vallarlo adecuadamente.
En noviembre del año
pasado escribí a D. Fernando Torres (Alcalde de Barbastro) para recordarle la
situación deplorable en la que se encuentra el solar, con deficiencias
importantes de seguridad y salubridad. Al no tener contestación presenté escrito
ante la Oficina delegada del Gobierno de Aragón dirigido a Salud Pública. La respuesta
fue rápida y me hacía saber que la competencia sobre estos espacios no es suya, sino del Ayuntamiento por lo que “le
trasladaban mi denuncia y le instaban a tomar las medidas oportunas de acuerdo
a la legalidad vigente”.
Hacia el 15 de febrero me
escribía el Concejal delegado de Urbanismo y Medio ambiente y me comunicaba la
orden dictada al propietario.
Y en este punto vuelvo a
la actuación realizada sobre el solar por el propietario, en la mañana del 28 de
febrero.
Durante 2 horas se
escondió la basura, igual que día tras día nuestros representantes en el Ayuntamiento de Barbastro esconden la cabeza para no ver los vertederos que serpentean las calles de la ciudad. Si
no miran hacia donde conviene mirar no ven problema alguno, y si no hay
deficiencias para qué van a importunar al propietario de turno. Por consiguiente, al no conservar los solares en condiciones óptimas, tanto el dueño de la parcela como el Ayuntamiento son promotores de prácticas incívicas.
Los solares-vertedero son
un problema de salud pública, pero no es el ciudadano el que debe estar
vigilante sino el Ayuntamiento realizando una labor de inspección eficaz para que el vecindario no sufra las consecuencias de actitudes negligentes de la propiedad.
Salvo error, no vi a
ningún empleado municipal a pie de solar mientras duró la operación maquillaje,
así que no sería raro que el propio concejal de Urbanismo se presentara en una
emisora de radio para explicar cómo el Ayuntamiento lleva a cabo una inspección
rigurosa de los solares y como ejemplo mencionara “la limpieza” realizada en el
solar de la calle Monzón.
Lo dicho, todo es un
paripé, pero lo triste es que los vecinos convivimos con estos vertederos y
además tenemos que oír explicaciones a representantes municipales que no hacen
honor a la verdad.
A pesar de todo a veces
miro el solar, levanto los ojos hacia la torre de la iglesia de los Misioneros
y me llega el recuerdo de cuando entraba con mi madre a la consulta impoluta
del Dr Brusáu, o, años más tarde, cuando acudía todas las tardes a la Academia
Cumbre, un lugar donde la vida se me abrió al mundo.
Todo eso ocurría en la misma parcela que hoy es un vertedero: un solar que comparte calle con la Oficina delegada del Gobierno de Aragón.
Qué pena teniendo siempre la sensación real de que lo único importante es hacer como que se guaran las formas; todo mera imagen....
ResponderEliminarBarbastro y sus vecinos no se merecen sufrir esta situación de dejadez, de suciedad. Me parece lamentable no se tome en serio y no lleven a cabo labores eficaces de inspección para que estos solares se conserven en condiciones de seguridad y salubridad.
ResponderEliminarNada chica, ni en vísperas de elecciones son capaces de......
ResponderEliminarY la pintura de los pasos cebra...?
Y la colonia de gatos vagabundos frente a la parte trasera de la casa Amparo?
Y.....la lista sería interminable.