Desde hace casi dos años, la calle Concepción Jerónima forma parte de mi vida. Es una calle corta. Tanto si la inicio desde la calle Toledo, como si accedo a ella desde la Plaza Jacinto Benavente, hacia la mitad de su recorrido, me encuentro con el lugar que la hace única.
En el número 15, está situada la Imprenta Municipal-Artes del libro de Madrid. Allí es donde me he familiarizado con términos y expresiones que forman parte de la historia de las Artes gráficas. Es reconfortante percibir el interés que demuestran los visitantes por las explicaciones que se inician en el momento en el que Johannes Gutenberg optó por escribir con letras metálicas e ideó el complemento adecuado, la prensa, para transferir la forma tipográfica al papel.
Cada semana compruebo la fascinación que despierta viajar al origen del libro impreso y, tantas veces como lo experimento, la calle Concepción Jerónima se afianza en ese lugar del corazón, donde se guarda lo inolvidable.
Me satisface saber que la Imprenta Ibor de Barbastro (Huesca) organiza talleres de tipografía. Qué mejor imagen, que su cartel anunciador, para ilustrar mi entrada.
El proyecto "Calles con alma" comienza a tomar cuerpo.
ResponderEliminarFelicidades desde Huesca
Gracias, Luis
Eliminar